La obsesión por eliminar al peronismo

Por Mirta Botzman.

El tema en discusión en estas elecciones es en esencia si los grupos económicos concentrados, la derecha nativa y el gobierno de Estados Unidos, independientemente de qué partido gobierne ese país, logran dar un importante paso para eliminar el peronismo de la fas de nuestro país, ellos querrían que para siempre. Ese fue el objetivo del golpe de la fusiladora en 1955 y la enorme resistencia popular obligó a la dictadura de Lanusse permitir el retorno de Perón de su largo exilio y la participación abierta y sin proscripción del peronismo en las elecciones de 1973. También fue un objetivo importante en el siniestro golpe cívico militar eclesiástico de 1976 y finalmente es el objetivo del Lawfare o guerra mediática judicial contra Cristina y todos los dirigentes y funcionarios kirchneristas que hicieron posible la década ganada y ese es el objetivo de la proscripción electoral de la principal lidereza política de las fuerzas populares.

Mirta Botzman en La 99.3 el 8 de junio de 2023

En esas tres ocasiones, las políticas efectuadas en lo económico, sin mencionar las otras políticas implementadas, habían permitido que los trabajadores participaran de más del 50% de todo lo producido en el país en un año.  En ningún caso los empresarios perdían plata, todo lo contrario, en 2015 las grandes empresas concentradas ganaban mucha más plata que cuando gobernó Macri que si bien los liberó de todo tipo de regulaciones se dedicó a hacer negocios propios y para sus amigos y fue tan brutal en su hacer que como dicen por ahí, chocó la calesita para mantenerse en el gobierno, aunque dejó instalados cambios en la estructura económica que claramente este gobierno no supo, no quiso o no pudo desmontar. Ahora que algunos dirigentes del Frente de Todos (FDT), claramente alineados con Alberto Fernández parecen jugar a como lo dijo explícitamente el Presidente, terminar con 20 años de kirchnerismo, la oposición pelea para ver si gana la versión del neoliberalismo “estratégico” o el neoliberalismo brutal.

El primero encabezado por Rodriguez Larreta que hace tiempo viene diciendo que para gobernar este país se necesita el consenso del 70% de la población para anular definitivamente al 30% restante que estima es lo que se identifica con el kirchnerismo. En su afán de juntar el 70% hace acuerdo con los radicales menos derechosos que los mendocinos y por supuesto los otrora peronistas siempre dispuestos a jugar el partido de destruir el kirchnerismo. Ahi va Schiaretti quien hace rato se olvidó de su militancia peronista de la juventud y Randazzo a quien, en 2015, le pareció que la gobernación de la provincia de Buenos Aires era poco para él y que luego encabezó una lista que impidió por muy pocos votos que Cristina fuera la triunfante en las elecciones de medio término de 2017, vale recordar que el jefe de campaña de Randazzo en ese momento fue el actual presidente de nuestro país, el minimizado Alberto Fernández. No parece una sucesión de casualidades. Claramente a la fragilidad en los principios y convicciones debemos agregar el enorme efecto disciplinador del lawfare, el mismo efecto disciplinador que tuvo la dictadura.

Claramente Rodríguez Larreta entiende que se necesita un mínimo de consenso para hacer viable sin demasiado desborde popular y represión, el ajuste que quiere hacer, que es el mismo que quiere hacer Patricia Bullrich sólo que a ella no la incomoda tanto reprimir y matar como lo ha demostrado mientras fue ministra de seguridad de Macri. Como al pasar quiero hacer un renglón sobre la actitud de Schiaretti quien interpuso un amparo para acceder a dólares al valor oficial para hacer frente al pago de una deuda de la provincia que vence este sábado a pesar que Córdoba cuenta con los dólares necesarios para hacer frente a ese pago. Obviamente el poder judicial le dio la autorización y así Schiaretti  se suma a las fuerzas políticas y financieras que alimentan la desestabilización de la economía desde el frente cambiario. 

En el FDT las candidaturas no terminan de definirse, si bien Wado de Pedro tiene grandes posibilidades y potencialidad para quedarse con los votos de Cristina todavía no es muy conocido en todo el país. Y de nuevo Alberto Fernández el presidente parece seguir pateando en contra, no sólo sigue con el juego que mejor juega que es  el fogoneo a la interna, en lugar de hacer eso podría motorizar alguna suma fija o algún estímulo que convoque a volver a creer que el peronismo/kirchnerismo es la única alternativa posible para mejorar las condiciones de vida de las amplias mayorías de nuestro país y evitar la consolidación de una estructura económica y financiera que nos deje instalados por demasiado tiempo en condición de colonia primarizada y extractivista.

De alguna manera, aunque la postulación de Massa a disputar el lugar de la presidencia del FDT no está del todo clara y aunque resigne ese lugar en esta oportunidad, aclara que la situación financiera de nuestro país es lo suficientemente débil como para no jugar a las zancadillas de la interna ni para varias candidaturas para las PASO. El razonamiento, con el que coincido, más allá de valorar las PASO como instrumento, es que si individualmente Milei termina siendo la persona más votada en agosto, con su delirante propuesta de la dolarización, la situación del país sería incontrolable hasta diciembre con consecuencias nefastas para el conjunto de la población. Varios representantes de la fuerza política de Massa lo dijeron en todos los tonos posibles, Massa está harto de laburar sin parar para conseguir dólares y estabilizar la economía mientras que “tanto propios como extraños, que generaron la crisis que hace necesaria la estabilización, están acá jugando a los soldaditos, mientras tendrían que estar cumpliendo sus obligaciones. Dos caras de una misma moneda» señaló a través de su cuenta de Twitter, la titular de la Cámara baja Cecilia Moreau en referencia tanto a Guzmán como a Matías Kulfas que ahora hacen de analistas independientes además de seguir jugando a los machos del off.

Además, mientras Massa sigue tratando de negociar condiciones que  hagan viable el período de elecciones y transición al nuevo gobierno que asumirá en diciembre, visiblemente el FMI sigue siendo el FMI y no se hace cargo de la responsabilidad que tiene para que estemos en la situación que estamos. Obviamente el ministro está urgido de los fondos comprometidos por el organismo para todo el año para prepararse de manera más sólida para el período electoral hasta el paso de gobierno en diciembre. Todos sabemos que en nuestro país en períodos electorales son habituales las corridas cambiarias. También todos sabemos, lo sabe el ministro Massa y también los técnicos del FMI que las corridas cambiarias provocadas por los devaluacionistas tienen consecuencias muy duras en términos de poder adquisitivo e inflación. Ya sabemos y creo que nadie necesita que reiteremos que la devaluación, la inflación y la incertidumbre no son igualitarias y generan muy pocos ganadores y muchos perdedores, diría la mayoría de la población.

Pero, en este momento no sólo Massa está urgido por cerrar las negociaciones que desde hace 6 semanas vienen teniendo con el FMI, ahora también el FMI tiene que llegar a un acuerdo.El ministro sabe que le queda al país poco tiempo hasta que llegue la fecha del 22 de junio cuando cae el próximo pago al organismo y que, si no se liquidara el compromiso o se negociara su prórroga, Argentina entraría en default con el FMI. Por el lado del organismo, se sabe que, si esto ocurre, el problema sería terminal; pero tanto para el país como para el propio Fondo. En el caso del director gerente para el Hemisferio Occidental del FMI Rodrigo Valdés sabe tanto como el ministro que se deben acelerar los tiempos, y que es el momento de tomar decisiones políticas; tanto desde Buenos Aires como desde Washington. Para Valdés sería además una doble mancha; ya que no sólo implicaría no haber cerrado una renegociación con el principal acreedor del organismo, sino que sería un pésimo debut para un funcionario que asumió en su cargo el 1 de mayo pasado y tomó la solución del caso argentino como una cruzada casi personal de carta de presentación para su gestión.

Seguramente en el futuro, un rasgo que será destacado de la gestión de Sergio Massa como ministro de economía, será la del tesón puesto en  buscar sin cesar recursos para fortalecer las reservas del Banco Central y certidumbre en un período electoral.Del conjunto de acuerdos y compromisos que obtuvo la delegación en China, sin dudas el que reflejará resultados más inmediatos sobre la economía es el de la ampliación del monto del swap (acuerdo de intercambio de monedas) por 5000 millones de dólares, por encima de los 5000 millones previamente «activados». Como alguna vez contamos acá, el swap es un tipo de acuerdo bilateral que China tiene planteado con más de veinte países en el mundo, como mecanismo de promover el uso de su moneda, el yuan, en el intercambio comercial y en operaciones financieras. 

En el caso de Argentina, el primer acuerdo de swap se suscribió en 2009, durante el gobierno de Cristina. El actual, que acaba de ser renovado por tres años, alcanza al equivalente a 19.000 millones de dólares. De ese monto, hasta ahora, se había habilitado el uso de 5000 millones para el pago de importaciones desde ese país. Es decir, China le financia a la Argentina las importaciones desde ese país, con un crédito en yuanes por el monto total de las operaciones que elijan este mecanismo de transferencia. Por lo pronto, dos de las principales industrias electrónicas de Tierra de Fuego aceptaron pasar pagos que vencían entre mayo y agosto de este año en dólares, a yuanes. Son Newsan y Mirgor de propiedad del hermano del alma Caputo, que en total tienen compromisos por 630,3 millones de dólares que se pagarán en yuanes. Aliviando, de ese modo, la presión sobre la divisa norteamericana porque desaparece esa demanda de dólares en el mercado cambiario. La opción que realizan estas dos empresas es también un beneficio para la macroeconomía, al «desdolarizar» esa porción del comercio exterior, pero además conlleva un beneficio individual para cada una de esas empresas, porque acceden inmediatamente al medio de pago para cancelar su deuda comercial con China, en vez de tener que esperar varios meses para acceder a los dólares del Banco Central, que por escasez de reservas va pautando y lentificando el proceso de entregas de los dólares. 

No puedo evitar volver a mencionar a Milei porque aunque no creamos a pie juntillas en las encuestas, corremos el riesgo que individualmente sea el candidato más votado en las PASO. Creo muy importante que toda la militancia tenga clara las consecuencias que podría tener para el país un eventual triunfo de este personaje. Las consultoras que hacen relevamientos señalan que Milei consigue apoyo de dos sectores de la población, por un lado jóvenes, en particular varones y por militares, policías y familiares de militares que reivindican la última dictadura cívico militar. De hecho, aunque no lo admita públicamente, Milei comparte el ideario económico ultraliberal de Martínez de Hoz, el primer ministro de economía de la dictadura. Aunque vocifere contra la Casta, él es parte de la casta, fue y es empleado de Eduardo Eurnekian quien figura entre los hombres más ricos de Argentina en el último listado de la revista Forbes y recibe financiamiento de gran parte del establishment económico.En Argentina, la última dictadura abrazó las mismas ideas de Milei. Las consecuencias del experimento nefasto de la dictadura fueron contundentes en materia económica. Creció el desempleo, el PBI industrial se desmoronó, aumentó la desigualdad y el endeudamiento externo y el salario sufrió la mayor caída de la historia argentina. El derrape de este último generó, como nunca antes en toda la historia económica argentina, un impacto social tan grande que jamás se pudo volver a los valores previos a golpe que hizo uso y abuso de la violencia estatal.

Para terminar, el llamado a la elaboración de un programa político de Cristina Kirchner y su insistencia en la necesidad de organizar al campo popular al que claramente adhiere Wado De Pedro, se refiere a la transformación necesaria, haciendo hincapié en cuestiones económicas. A saber: la distribución del ingreso, la estructura de la producción definida como la especialización (los productos que se exportan) y el grado de desarrollo de los procesos de producción. Son principios y consignas muy accesibles al sentido común de nuestro pueblo y debería servir de consigna para militar hasta que los referentes más claros del FDT crezcan, al punto de volverse figuras positivas y visibles de la política argentina.

El problema en la Argentina no son los pobres, sino los ricos que se asientan básicamente en la renta agropecuaria y minera para vender al exterior, siendo funcionales a una Argentina que se integra como mero proveedor de alimentos y materias primas, que generan muy poco trabajo y de baja calidad. Esta es la alternativa ofrecida por Milei y los otros representantes de la derecha neoliberal más o menos violenta. Es a lo que debemos enfrentar en las próximas elecciones.

Mirta Botzman

La economista Mirta Botzman nos propone una mirada nacional, popular y democrática de la economía nacional e internacional, todos los jueves, a las 7,30, en su columna Cuentas Claras en el programa Contala como quieras, en La 99.3.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *