Son unos animales

Tiburones asesinos, perros rabiosos, zorros taimados: la desesperación de los diarios oficialistas ante el retroceso del macrismo en las encuestas los lleva a nombrar a los opositores, y a los amigos del peronismo rubio y de ojos celestes, como unos animales peligrosos, depredadores.
La “casualidad” de esta línea editorial en Clarín y La Nación la expresaron en estos días tres columnistas: Carlos Pagni en La Nación y Eduardo van der Kooy y Jorge Lanata en Clarín. Como señor más atildado, Joaquín Morales Solá se “limita” este domingo a decir que los peronistas solo quieren causar daños. Y se declara adolorido por cualquier ser viviente que no sea macrista, al preguntarse “cuántos argentinos prefieren todavía seguir habitando en la ficción populista”. Tremenda intolerancia, sí, pero expresada con mucha educación.
El tema de las tarifas, la inflación galopante y, adicionalmente, las reservas para frenar al dólar, se impone en títulos, noticias y comentarios, a pesar del desesperado intento por desviar la atención, para lo cual el dispositivo en el poder apeló una vez más a la “justicia independiente” para decidir y aplicar en tiempo récord la detención del empresario Cristóbal López. Pero no alcanza y hoy Clarín prueba con Odebrecht, eso sí enfocándose solo en el capítulo de las acusaciones a los “K” y olvidándose por completo de las que conciernen al macrismo y sus amigos, como Calcaterra.
En fin, no tienen más remedio que atender la situación económica, a su “estilo”: quitándole todo valor a la discusión de proyectos sobre tarifas en el Congreso e incluso ridiculizándolo. “Alboroto”, le llama Pagni, para hacerle lugar luego a su odio más profundo: “El plan peronista para las tarifas no fue pensado por expertos energéticos, sino por zorros electorales”.
Lanata imita esta línea el sábado: “la oposición encontró un punto débil y avanza con la avidez de los tiburones”. Y Van der Koooy, el domingo: con las acciones en el Congreso es como si al peronismo “se le hubiera despertado el reflejo del perro. Tiene al gobierno asido de una pierna con los dientes”.
Y lo ya dicho sobre Morales Solá: el peronismo es demagógico y avanza sin detenerse a pensar en “cuánto daño hace”. Y esto incluye a Massa, que para eso se “rodea” con el kirchnerismo, porque “tiene estómago para todo”.
Si estas expresiones de intolerancia aún asombran, hay otra que no se quedó atrás: El miércoles La Nación, ante un fallo que avala expulsar a extranjeros considerados delincuentes, “ilustra” el artículo con un grupo de personas que caminan por una ruta con banderas de Bolivia.
El mejor humor de la semana se lo llevó Clarín el jueves: pone a Vargas Llosa en la tapa y lo llama “un Nobel frente a los fanatismos”, olvidándose de que extendió certificado de legitimidad al asesinato de un presidente, aunque solo si está en la lista de los odiados por la ultraderecha mundial.
Lo que no resulta nada graciosa es la macarteada de una redactora de Clarín: acusó con nombre y apellido a algún directivo de la Feria del Libro de “gozar en primera fila” de la protesta en el acto inaugural.

Semana a semana el periodista y escritor Hugo Muleiro repasa con detenimiento las columnas de opinión y análisis de los principales medios gráficos de mayor alcance nacional en tanto hegemónicos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

A %d blogueros les gusta esto: