«Hoy Iguazú tiene dos escenarios claramente definidos: el centro, que está muerto, vacío, sin actividad, con muchos comercios que se han cerrado (los de productos regionales, restaurantes, bares), porque históricamente se dedicaron a ofrecer sus servicios al turista; y los barrios, con gente que ha encarado emprendimientos», aseguró el periodista Sergio Martyn en La 99.3.
Martyn también afirmó que «hay pasos clandestinos (entre Argentina, Paraguay y Brasil) por los que permanentemente hay gente yendo y viniendo… Si abrís cualquier página de compra y venta encontrás ofertas de aires acondicionados, celulares, toda mercadería que viene del otro lado. Esto no está estoqueado: la gente lo trae. Con Brasil pasa otro tanto con productos alimenticios. Ese paso nunca paró».