Se movilizaron y lograron su cometido

«Lo que pasa con el CONICET es lo que está pasando con todos los organismos de la administración pública nacional de la aplicación de un brutal ajuste a partir de la decisión de entregar nuestra soberanía económica al Fondo Monetario Internacional», enfatizó el doctor en Ciencias Naturales Pablo Berrozpe, becario en el Instituto Nacional de Medicina Tropical con sede en Puerto Iguazú, entrevistado en el programa Contala como quieras.

Los becarios del CONICET en todo el país se movilizaron la semana pasada reclamando que se homologuen los acuerdos salariales y se los inlcuya en las paritarias que suscribieron otros trabajadores del organismo a través de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN). Finalmente, el viernes se conoció que tras una reunión de los becarios con autoridades del CONICET y de UPCN fueron incluidos en las paritarias.

Actualmente, una beca doctoral del CONICET es de 18.900 pesos, justo en la línea de pobreza establecida para mayo. Tras el acuerdo del viernes esas cifras se incrementarán en un 15 por ciento acordado en paritarias.

Walter Koppmann, de Jóvenes Científicos Precarizados, confirmó que «en agosto recibiremos el primer 3 por ciento. En septiembre el 6 y en octubre también el 6 por ciento». Los estudiantes recibirán la semana que viene un bono por 2 mil pesos.

Koppmann, de todas maneras, detalló que «no estamos de acuerdo con el 15 por ciento acordado», y advirtió que para los becarios «UPCN no representa a nadie. Los acuerdos tienen que ser votados en asamblea. Hasta el mismo gobierno dice que la inflación será de mucho más». Sin embargo, desde Jóvenes Científicos Precarizados subrayaron que el martes 17 de julio volverán a reunirse con las autoridades porque «nos deben la cláusula gatillo. Y este jueves no se comprometieron a pagarla».

«El reclamo fue a nivel nacional con toma de todos centro del país y en Iguazú nos mantuvimos en asamblea permanente», contó Berrozpe, quien explicó que los becarios «tenemos un formato contractural en el que no se nos reconoce como trabajadores, no tenemos aguinaldo, no tenemos vacaciones, no nos incluye ningun sindicato», aunque ingresan por concurso de antecedentes por el que al ganar la beca debe comprometerse a alcanzar el doctorado en cinco años y luego se debe volver a concursar por dos años más. «No tenemos obra social ni hacemos aporte jubilatorio, lo que habla de condiciones laborales muy precarias».

Diálogo con el doctor en Ciencias Naturales Pablo Berrozpe, becario del CONICET:

Colaborá con Nosotros

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

A %d blogueros les gusta esto: