Nación sigue sin enviar fondos para comedores escolares
«El hambre no puede esperar», se escuchó a una maestra de uno de los 200 comedores escolares que dependen del programa nacional «El hambre es más urgente» cuyos fondos no son remitidos por el Ministerio de Desarrollo social de la Nación desde el mes de marzo de este año.
La deuda que se reclama desde el mismo Ministerio de Educación de la provincia asciende a 15 millones de pesos que en estas condiciones son cubiertos por la provincia que redistribuye los 12 millones de pesos que tiene asignados para 1200 escuelas cuyos comedores están bajo su órbita, a los que debe añadir los 200 que dependen de Nación.
Mientras que el Ministerio de Educación hizo el reclamo formal a Desarrollo Social de la Nación, en la Legislatura provincial se aprobó un proyecto de comunicación del Partido Agrario y Social al que se le dio tratamiento preferencial en la sesión del jueves 14 de junio.
El temor de las autoridades provinciales y de los docentes es que las partidas nacionales terminen siendo parte de los recortes presupuestarios que se están realizando en distintas áreas en razón de los ajustes que se están profundizando a partir de los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional.
«Hacía muchos años que no recibíamos a los niños con hambre», comentó una docente a La99punto3 cuando llamó al medio para pedir que se insista con el reclamo público «porque ya no sabemos donde recurrir». Inmediatamente, se buscó comunicación con la responsable del área de Nutrición del Ministerio de Educación de la Provincia, Gabriela Reyna Alan, con quien no fue posible concretar una entrevista pactada previamente.
La inquietud de los docentes es también conocer cuanto es la suma que se asigna por alumno para los comedores y si esos montos varían entre los que asisten a la jornada común y los que están en jornada extendida. Igualmente, buscan informarse si esas partidas contemplan el consumo de gas y los elementos de higiene.
Según se informó en Primera Edición, el Gobierno provincial gestiona desde hace dos años la actualización de los valores per cápita a comedores escolares porque desde 2016 la Nación mantiene congelados estos montos, pese a la inflación acumulada desde entonces. El dinero del programa «El hambre es más urgente» se destina en las escuelas a la compra de leche, panes y frutas para servir a la población escolar más vulnerable.
Consultadas las páginas web de los ministerios de Desarrollo Social y de Educación de la Nación no fue posible acceder a ninguna información sobre el programa «El hambre es más urgente». De hecho, las consultas sobre el programa solo arrojan información sobre su desarrollo hasta 2015.
Un síntoma de la situación que viven en las escuelas a las que no les llegan los fondos fue la iniciativa de jóvenes de Puerto Iguazú, en mayo, de convocar al público que asistió a las distintas sesiones del Iguazú en Concierto a que se acerquen a los distintos escenarios con alimentos no perecederos para destinarlos a los comedores.
