La mujer y el estigma de los trabajos reconocidos como masculinos
El inicio inminente del campeonato mundial de fútbol, con la particularidad de que se va a desarrollar en un país árabe, Qatar, con costumbres ancestrales de relegamiento y sumisión de las mujeres y no aceptación absoluta de las diversidades sexuales, fue el tema que desarrolló Amanda Lozina en su columna Hablemos de ESI del viernes 4 de noviembre.
«No oigo hablar de otro tema y, además de las especificidades del país donde se va a realizar, pienso que el fútbol es reconocido como un juego de hombres aunque hace tiempo que también lo juegan las mujeres», apunto Amanda y reflexionó que «sin embargo, solo a los varones se les admiten niveles de rentabilidad en todas las instancias y ni hablar a los que juegan en primera. Hay ahí como una protección posible para varones que sufrirán la frustración de que es una profesión que tiene límite de edad muy joven que todavía no nos hemos dado la oportunidad de trabajarlas socialmente, pero amén de todo esto, respecto del fútbol jugado por mujeres, el fútbol femenino no tiene la misma rentabilidad y entonces me permito pensar y problematizar sobre cuántos espacios de rentabilidad efectivamente son ocupados por mujeres».
«En mi vida cotidiana me pregunto eso de los trabajos desarrollados por mujeres pero que son culturalmente reconocidos como de varones, entonces cuando me tomo el micro todos los días para ir a laburo o cuando me tomo taxi muy pocas veces sucede que las conductoras son mujeres y entonces me pregunto: ¿qué onda? ¿porqué no hay colectiveras mujeres?» se interpeló y a partir de allí desarrolló el tema del día.
En su tésis de grado en la Facultad de Periodismo de la Universidad Nacional de La Plata, junto a Pilar Miguez Iñarra, Amanda y Pilar, ambas misioneras, fueron distinguidas por la producción y edición del cuadernillo «Hablemos de ESI, una caja de herramientas para trabajar en el barrio». Con ese y otros antecedentes, en su columna semanal Hablemos de ESI, en el programa Contala como quieras, en La 99.3 de Posadas, Amanda analiza, reflexiona y ofrece herramientas para el abordaje de la Ley 26.150 de Educación Sexual Integral sancionada en 2006, que establece el derecho de todos los estudiantes a recibir contenidos de educación sexual de manera integral en todas las escuelas del país desde el Nivel Inicial hasta la formación técnica no universitaria. Esta ley da origen al Programa Nacional de Educación Sexual Integral.
