Indignados con los jueces

El macrismo duro está indignado con los jueces que fallan en contra de sus expectativas o necesidades. Después de varias críticas de días pasados, este domingo toman la bandera Blanck de Clarín y Morales Solá de La Nación.
La causa principal de este enojo oficialista es la liberación del empresario López y el cambio de acusación, que pasó de defraudación a la más leve de evasión.

Blanck dice que no se sabe si los jueces que no fallan como quiere el macrismo expresan independencia o anarquía. Morales Solá sentencia que son inmorales.

Independientes o anarquistas, Blanck dice que además algunos jueces tienen en sus manos asuntillos que podrían perjudicar al oficialismo: menciona a Caputo y sus interminables andanzas de toda calaña, y el caso del Correo, en el que el juez Ariel Lijo “hace jueguito” hace meses, teclea sin pudor.

El amor de Morales Solá por Macri tiene menos matices: habla de “escándalo político y moral” por las decisiones judiciales que no le gustan. Contrasta a los jueces que así resolvieron con su tridente de oro, héroes en corrección, moralidad, republicanismo: los jueces Bonadío y Ercolini y el fiscal Pollicita. Todo dicho.

Pero sobre la justicia, quedó un mojón el jueves dejado por el chico malo Carlos Pagni, que a veces se pone ácido y burlón con Su Majestad Mauricio: escribió que Lorenzetti prepara un fallo contrario a la quita de dinero a los jubilados, la muy mal llamada “reforma previsional”. Más aún, dice que ese fallo será usado por el Supremo para lanzarse políticamente.

Fíjense que hoy trata este tema Tiempo Argentino: el supuesto fallo de Lorenzetti fue uno de los temas que figuró en una reunión entre el ministro Garavano y los cortesanos. Habrá que ver cómo entra Clarín en este sainete: no nos asombre si reaparecen acusaciones contra Il Capo de la Corte.

Saliendo de la “justicia”, Kirschbaum en Clarín vuelve a un objetivo que Magnetto nunca olvida: incidir hasta donde el grupo pueda en la elección del peronista que sea candidato en 2019. A esos fines, escribe que la reunión de San Luis fue muy mala porque estuvo dominada por Moyano y los K. Luego de los insultos de todos los días a este sector, dice después que otros «peronistas» intentan algo diferente, “por ejemplo” (así lo pone) Sergio Massa, quien trabaja en una alianza con Stolbizer y socialistas santafesinos. “Está muy activo” Massa y habla con otros, “por ejemplo” Randazzo. Lo mismo: todo dicho.

Semana a semana el periodista y escritor Hugo Muleiro repasa con detenimiento las columnas de opinión y análisis de los principales medios gráficos de mayor alcance nacional en tanto hegemónicos.

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