Apagones virtuales y cortes reales
Docentes de toda la provincia volvieron este jueves a las plazas, calles y rutas en reclamo de mejoras salariales, mayor presupuesto para el área educativa y mejoras de conectividad, en una protesta que se retomó a principios de este mes con simultáneos “apagones virtuales” con los que interrumpen los envíos por vía virtual de actividades, tareas y contenidos a sus alumnos.
Las medidas de fuerza intentan retomar un diálogo con las autoridades provinciales que revierta, en primer lugar, una situación básica: “Los docentes de Misiones somos los peor pagos a nivel nacional”, según le aseguró a Contala como quieras Rubén Vallejos, referente de San Vicente de Docentes Autoconvocados, una de las agrupaciones sindicales que participa del plan de lucha, que además de esa ciudad registra los escenarios más combativos en Oberá, Montecarlo, San Pedro y El Soberbio.
“Hoy un docente con diez años de antigüedad está cobrando lo mismo que un maestro que recién ingresó al sistema educativo: 25.000 pesos de bolsillo”, dijo, y atribuyó ese desajuste a la forma en que se dispone el pago de la garantía salarial, un ítem que, así aplicado, “lo único que hace es achatar la pirámide salarial”.
Explicó que “el docente de Misiones cobra su salario en tres veces: a fin de mes, el salario; los 21 de cada mes, el Incentivo Docente; y por último la garantía salarial, que se está pagando con tres meses de retraso”.
Y señaló que lo primero a resolver en materia salarial es elevar el básico. “Hoy, la provincia está pagando ese cargo 7.077 pesos, y estamos pidiendo un básico de 12.800 pesos para el maestro de grado”, especificó.
Y, en materia de remuneraciones, indicó también que la lucha docente exige “la Inmediata corrección del salario del jubilado docente: un trabajador de la educación que se jubiló hace siete u ocho años hoy está cobrando 14.000 pesos después de treinta años de trabajo. Es vergonzoso”, definió.
Clases por Whatsapp
“El docente de Misiones está hoy más sobrecargado que cuando se daban clases presenciales”, sostuvo Vallejos, ya que los problemas de conectividad generalizados en toda la provincia obligan a los maestros y profesores a redoblar tareas y horarios para atender las necesidades básicas de aprendizaje de los chicos.
“La provincia está poniendo muchos recursos en una plataforma virtual, la Guacurarí, que no funciona. Cada vez que algún alumno o alumna, profesor o maestro quiere utilizarla no funciona. Por eso los docentes estamos enviando las tareas a nuestros alumnos a través de nuestros whatsapp, de nuestros teléfonos. Estamos costeando día a día esta modalidad”, comentó.
“Así sostenemos esta educación virtual, y lo digo entre comillas, porque hay que aclarar que aunque el Gobierno diga que estamos en situación de normalidad, no es así. Hay muchos alumnos que no tienen la posibilidad de contar con un teléfono celular o con conexión a Internet, y ese alumno queda aislado del sistema educativo”, agregó.
Fue particularmente crítico con la plataforma Guacurarí. “Ya en marzo las primeras pruebas no dieron resultado: los alumnos no podían acceder, el docente dejaba actividad (allí volcada) y los alumnos no podían acceder. Al parecer es una plataforma bastante compleja para trabajar, los chicos no entendían el modo de ingresar”, contó.
Y además desmintió la pretendida gratuidad del uso de la plataforma, “porque al acceder los alumnos encontraban que les consumía los créditos de sus teléfonos en una o a lo sumo dos semanas”, y para la mayoría de las familias las recargas se tornan imposibles. “Es imposible hacer un seguimiento pedagógico de esta manera”, sentenció.
Un Presupuesto que presupone poco
Entrevistado el día que la Cámara de Diputados provincial iniciaba el tratamiento del Presupuesto 2021, cuando analizaba las inversiones para las áreas educativa y de deportes, Vallejos se mostró muy preocupado por las decisiones que se puedan tomar al considerar al plantel docente.
“El presupuesto vigente para este año tuvo un incremento (nominal) del 38.,4 por ciento, y los docentes recibimos apenas un 23 por ciento (de reajuste salarial). El proyecto prevé para el año próximo un aumento del 25,7 por ciento, de modo que no podemos calcular que proyecten darnos más que un 13 o 14 por ciento”, dijo.
“En 2019 nuestros salarios perdieron más de treinta puntos de poder adquisitivo, y para este año las perspectivas apuntan a que perderemos otros 20 puntos: en dos años habremos perdido el 50 por ciento de nuestro poder adquisitivo”, estimó.
Incluso brindó datos que asegura haber tomado de la página oficial del Gobierno, y aseguró que este año “la provincia recibió un promedio de 251 millones de pesos por día hábil en concepto de coparticipación. De acuerdo con la Ley de Financiamiento Educativo (Nº 26.075), 54 millones diarios corresponden a Educación. Desde enero hasta hoy, en lo que va del año, a la provincia ingresaron para Educación 5.686 millones de pesos. ¿Qué están haciendo con ese dinero, con nuestros recursos?”, se preguntó.
“Ésa es plata de todos los argentinos, de todos los misioneros”, recalcó, y apuntó: “Eso no se ve reflejado en salarios, en designaciones de porteros, en infraestructura, en acondicionamiento de los edificios… Las escuelas están abandonadas.”
Los docentes en lucha ya anunciaron nuevas manifestaciones callejeras, con asambleas, cortes de calles y rutas, para el martes de la semana próxima. “No vamos a bajar los brazos”, aseguró Vallejos.
